30 julio, 2025
Entre los meses de junio y julio de 2025, la Red de Solidaridad y Apostolado Indígena (RSAI) impulsó un proceso participativo con mujeres indígenas de distintos países y territorios, como parte del proceso de evaluación y proyección de su caminar para los próximos años. Este ejercicio incluyó tanto a mujeres que forman parte activa de la RSAI como a otras que han participado en distintas actividades de la red, reconociendo en ellas trayectorias significativas de compromiso territorial, espiritualidad y acompañamiento comunitario.
El objetivo fue claro: recoger la voz profunda, espiritual y territorial de las mujeres indígenas, para que sus sentires, luchas y propuestas orienten la misión, visión, valores y objetivo de la RSAI, desde una raíz encarnada en los pueblos.
Este proceso se desarrolló en dos momentos. Primero, a través de una tarea de reflexión personal o comunitaria, en la que las mujeres fueron invitadas a responder preguntas sobre lo que valoran de la red, sus sueños para sus comunidades y las acciones que consideran necesarias para el futuro. Luego, el sábado 19 de julio, se llevó a cabo una sesión virtual, cargada de espiritualidad y afecto, donde compartieron sus experiencias, anhelos y caminos posibles.
Participaron 12 mujeres indígenas pertenecientes a los pueblos: Mapuche (de Chile y Argentina), Kichwa Puruhá (Ecuador), Wayuu (Venezuela) Maya Kiché (Guatemala), Popoluca y Nahualt (México), Wapichana (Brasil) y Quechua (Perú).

Cada una habló desde su vivencia, pero también desde una memoria colectiva que atraviesa generaciones. Sus aportes permitieron entrelazar realidades distintas en un solo tejido de esperanza y sabiduría.

Las mujeres expresaron con claridad que la RSAI debe existir para caminar junto a los pueblos indígenas, no desde el poder, sino desde la escucha, el respeto y el acompañamiento mutuo. Su misión debe nacer del amor, la compasión, la espiritualidad viva y el compromiso con la vida de los territorios.
“La RSAI no habla por nosotras; camina con nosotras.”
“Nos mueve el amor, la compasión, la fraternidad… y el dolor de nuestras tierras heridas.”
Desde distintos contextos, las mujeres compartieron un anhelo común: una RSAI activa, cercana, espiritual y transformadora, que articule voces, lenguas, símbolos y sueños desde los pueblos indígenas.
“Sueño con una red donde los deseos de transformación se tejan colectivamente.”
“Deseo que esta red mantenga viva la conexión con los pueblos indígenas y escuche las voces de las mujeres que resisten.”
Un eje transversal fue la espiritualidad como fuente de vida, discernimiento y acción. Las mujeres valoraron profundamente que la RSAI haya permitido orar, compartir y sanar desde sus propias formas espirituales, sin imposiciones ni uniformidad. Este enfoque ha generado espacios donde lo sagrado, lo comunitario y lo cotidiano se entrelazan, reconociendo la riqueza de cada pueblo y cada camino espiritual.

Este proceso de escucha y reflexión brindará insumos clave para el encuentro presencial que se realizará en el mes de agosto en Cerocahui, Tarahumara (México). Allí, la RSAI, en conjunto con integrantes de la red indígena de México, y representantes de redes de la CPAL, como la Red de Radios Jesuitas, la Red Jesuita con Migrantes y la Federación Internacional de Fe y Alegría, compartirán un espacio de discernimiento colectivo sobre el presente y el futuro de la RSAI.
La palabra de las mujeres será brújula para ese encuentro, recordando que toda planificación auténtica debe estar enraizada en las voces de quienes viven, sueñan y resisten en los territorios.
Agradecemos profundamente el apoyo solidario de Canadian Jesuit International (CJI) y de ALBOAN, por sumarse a este proceso con compromiso, sensibilidad y cercanía con los pueblos indígenas.
RSAI