Un grupo de migrantes de Venezuela desembarcó en la Base Aérea de Recife (PE) y fue recibido en la Unicap (Universidad Católica de Pernambuco), el 17 de diciembre. En total son 102 personas entre hombres, mujeres, recién nacidos y niños beneficiados por el Programa Pana. El Gobierno del Estado de Pernambuco y el Ayuntamiento de Recife van a acompañar a los venezolanos dando soporte en el encaminamiento profesional y matriculando a los niños en edad escolar.

"Esa situación de los migrantes es un llamamiento para ser lo que queremos ser: una Universidad abierta, humanística. "La acogida de los venezolanos es una forma de comprender mejor nuestra misión", dijo el rector de Unicap, padre Pedro Rubens Ferreira de Oliveira, recordando que el Superior General de la Compañía de Jesús, padre Arturo Sosa, es venezolano y que la fecha de acogida de los migrantes tuvo un gran simbolismo por ser el aniversario del Papa Francisco.

"Mi hijo quería una pelota, una ropa y yo no podía comprar. La situación se fue cada vez peor. "Llegué a pesar de sólo 54 kilos porque pasé hambre", afirma el venezolano Michael Chaves, de 38 años. Este es el relato del camionero, que vivía en la ciudad de Guacara junto a su esposa y tres hijos. "Quiero hacer la formación de conductor para volver a trabajar", dijo.

Las dificultades del pasado dieron lugar a la esperanza también para la familia Zambrano. El operador de máquinas Daniel, de 35 años, trajo a Brasil con la mujer, Raysel, 33, y sus tres hijos Heffri, 13, Royfrelis, 7, y Claudia, 4. Antes de la crisis económica de Venezuela, él trabajaba en la construcción de represas transportando contenedores en Puerto Ordaz.

Con el objetivo de ser referencia en la acogida, protección e integración de inmigrantes y refugiados en Brasil, el Programa Pana es financiado por el gobierno de Estados Unidos y cuenta con la sociedad de Cáritas brasileña y suiza. Los venezolanos serán instalados en doce inmuebles alquilados por Cáritas.

Además, los migrantes recibirán apoyo de la Casa de Derechos de Unicap, en el que la acogida será ofrecida por medio de un equipo formado por cuatro profesionales - psicólogo, asistente social, educador y asistente administrativo. El espacio también brindará capacitación en portugués, Cultura brasileña, Derecho Laboral, Economía Solidaria, la atención sanitaria, psicológica y jurídica en apoyo de IHU Unicap (Instituto Humanitas). El Ministerio Público estatal también es socio del proyecto. En Recife, es importante recordar que la Casa de Derechos estará abierta para atender a migrantes y refugiados de todas las nacionalidades.

 

Fuente: jesuitasbrasil